En un duro comunicado que hizo público el día 4 de noviembre de 2020, la Mesa en Defensa de la Sanidad Pública de Madrid (MESDAP)-Marea Blanca, en la que participa la FRAVM, critica las últimas actuaciones del Gobierno de Díaz Ayuso en materia sanitaria, como la construcción, sin personal, del hospital de Emergencias Isabel Zendal o las derivaciones de pacientes del hospital Gregorio Marañón al centro privado Beata María Ana. Acciones que, junto con otras muchas, suponen un auténtico peligro para la salud de la mayor parte de la ciudadanía.
“Estamos en alerta roja cada vez más negra, por los peligros que el gobierno Ayuso y Aguado suponen de forma permanente para el 99% de madrileños, repitiendo vicios ideológicos y apuntalando graves decisiones erróneas que no siguen ningún criterio científico. Sólo responden a un único objetivo, la especulación fácil con dinero de todos y a costa de la Salud Comunitaria”. De esta manera empieza un comunicado en el que se pone de manifiesto una forma de hacer que viene de lejos.
“Se ha producido una descapitalización de los centros sanitarios públicos, tanto en personal como en recursos materiales y tanto en Atención Primaria como en Atención Hospitalaria. La pandemia de SARS-Cov2, más conocido como Covid-19, que nadie pudo prever, ha puesto de evidencia no sólo las carencias del Sistema Sanitario Público madrileño, sino también la absoluta falta de un plan de actuación del Gobierno regional”. Frente a este hecho, y a pesar de los pesares, “se ha demostrado que sólo lo público puede afrontar una emergencia de esta magnitud; de ahí la necesidad de reforzar y potenciar el Servicio Sanitario Público Madrileño”, indica la MEDSAP.
La mesa tiene claro que “no se han tomado las medidas sanitarias necesarias para evitar el aumento de la pandemia”. “Es evidente que el Gobierno de Madrid ha incumplido todas las promesas que en junio vendió: contratar más personal sanitario para reforzar la AP y la Salud Pública; contratar rastreadores para seguir la cadena de contagios y garantizar la Salud Comunitaria de la población”, recuerdan los colectivos sociales.
Por otro lado, estos critican la construcción del nuevo hospital de pandemias “sin contratación de personal sanitario y solo con una reorganización de los profesionales de Hospitales Públicos y de Atención Primaria, que supondrá la disminución de efectivos en aquellos, afectando negativamente a su funcionamiento y por tanto a los usuarios”. “También -continúa- dará lugar a una disminución de la actividad asistencial, aumentando las listas de espera hospitalarias. En AP, ya de por si con asistencia deteriorada (por falta de personal, recargo por la atención telefónica y por la sobrecarga burocrática debido al Covid19); se producirá definitivamente un colapso asistencial”. Todo esto, “sin haber hablado aún del coste económico que significa la construcción de nuevos hospitales. Del hospital del IFEMA hasta el momento no han dado datos transparentes de su gasto, y del nuevo de Valdebebas se dijo inicialmente que el coste sería de 50 millones de euros, aunque a fecha de 30 octubre hemos conocido que hay ya un sobrecoste de 45 millones de euros, sin justificación alguna por parte del gobierno de la Comunidad de Madrid”.