El Manzanares, un río de oportunidades
LA DIGNIDAD DEL SUR En el discurso de las asociaciones vecinales, el parque lineal del Manzanares es indisociable de la expresión dignidad del Sur. Es polisémica, pues se refiere a un territorio víctima del olvido y de un trato ominoso por parte de los poderes y, a la vez, revela el afán de unos barrios resistentes y reivindicativos. No es todo el Sur de Madrid, pero lo denota y lo simboliza, pues representa, como ningún otro lugar, la periferia de la conocida diagonal de la desigualdad. El parque lineal del Manzanares es el asentamiento de los barrios vulnerables y de los artefactos que nadie quiere, desde las infraestructuras duras de la movilidad hasta las plantas de depósito y tratamiento de los desechos de la gran ciudad. La coincidencia no es una mera casualidad, sino una consecuencia de las formas concretas de planificar el crecimiento de la urbe. Ahí está el origen del conflicto del Sur con las instituciones. Sin tenerlo en cuenta es imposible entender la situación y su devenir. Aquél es la expresión de la queja contra el abandono, dicho de una forma deliberadamente amplia, y la materialización de las demandas ciudadanas de transformación. Seguir leyendo en archivo PDF:…
COMUNICADO DE LA FRAVM EN EL 45 ANIVERSARIO DE SU LEGALIZACIÓN.
Han pasado 45 años desde el 2 de noviembre de 1977 en que la FRAVM fue legalizada. Con el lemaEL BARRIO ES NUESTRO, el día 5 de Noviembre se realizó una gran Manifestación de celebración de este Aniversario, seguida de un acto festivo en el que se leyó un COMUNICADO que hace un breve recorrido de una trayectoria que va mucho más allá de lo que se puede recoger en un breve relato. Por su significado y por seguir siendo una declaración de compromiso con la situación de los barrios y de sus Asociaciones Vecinales, es un Manifiesto de la plena actualidad de lo que comenzó hace ya más de 45 años. Después del saludo y el agradecimiento general, el COMUNICADO dice: “Como sabéis, el 2 de noviembre de 1977 la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos de Madrid, por fin, era legalizada tras dos años muy duros e intensos, plagados de protestas ante la negativa del régimen a reconocer aquella incipiente organización, fruto de la unión de varias decenas de asociaciones vecinales, que llevaban ya años haciendo de sus barrios y municipios lugares más amables, solidarios y comprometidos con el anhelo de una sociedad libre, justa e igualitaria. Por eso…